Por Paco Gómez.
Departamento de Biología
El ejercicio físico tiene grandes beneficios probados, como un corazón más sano, un sistema inmunitario reforzado, un cerebro más ágil y una vejez más saludable, pero…. es una pérdida de tiempo si el único objetivo es adelgazar.
¿Cómo es eso posible? Pues bien, numerosos estudios llevados a cabo en los últimos años demuestran que dedicar la vida a cazar en las tierras de Tanzania no requiere más calorías que llevar una vida tranquila en cualquier ciudad occidental.
La obesidad, por tanto, es fruto del vicio de la gula más que de la pereza.
Hay que pensar en la dieta y en la actividad física como en dos instrumentos con bondades distintas: el ejercicio, para mantenernos sanos y vigorosos; la dieta, para cuidar el peso.